LA LEYENDA COMENZO ASI...
La historia de Carminati y Fleco
Carminati se encontraba en un tubo del patio de su casa haciendo ¿quién sabe qué?. En eso Fleco trepó la gran muralla que lo separaba del patio de Carminati. Era la sexta vez que lo hacía. Carminati al escuchar ruido, tomó la cesta con un peculiar polvo blanco y corrió hacia adentro de
Comenzó a correrlo y Fleco se metió en el galpón. Quince minutos después Fleco salió con una motosierra y Carminati empezó a correr, pero su hermanita más chiquita le metió la traba y se cayó. Fleco llegó y dijo: “¡¡Disfruta de tus últimos momentos!!”. Él le pidió a la hermana de Carminati que le trajera la cesta que estaba ahí en el suelo. Luego de que la hermana de Carminati le había dado la cesta, Fleco aspiró el polvo blanco y estornudó: “¡¡Es harina!!”, le grito: “Ahora te cortaré la cabeza”. Brrrmmmm, brrrrrrmmmmmm. Al escuchar estos ruidos provenientes de la motosierra, la hermanita se puso a llorar. Fleco, acostumbrado a consolar gente, trató de calmar a la hermana y Carminati aprovechó ese momento y escapó. Fleco, cuando la hermanita dejó de llorar, se dio cuenta de que Carminati se había escapado. Dio media vuelta y vio a su amigo haciéndole Pito-Catalan. Carminati le dijo: “¡¡¡ Estas loco, necesitás un neuropsiquiatra !!!”. Fleco respondió: “¡Claro!, ¿vos haciendo Pito-Catalan y yo soy el que necesita ayuda? ¡¡¡Largá los estimulantes!!!”
Carminati con la harina que sobró hizo una torta de dulce de leche, la cual sabía horrible y Fleco lo demandó por intoxicación.